martes, 28 de abril de 2015

El papel pintado amarillo – Charlotte Perkins Gilman

Charlotte Perkins Gilman (Hartford3 de julio de 1860 – 17 de agosto de 1935) fue una destacada socióloga, novelista y cuentista estadounidense, que además escribió poesía y obras de no ficción, e impartió conferencias para la Reforma social. Durante un tiempo fue una utópica feminista cuando sus logros eran excepcionales entre las mujeres, y sirvió de modelo para futuras generaciones de feministas debido a sus ideas y estilo de vida poco ortodoxos. Su obra más conocida actualmente es un cuento semi autobiográfico El papel de pared amarillo ("The Yellow Wallpaper"), que escribió durante un brote severo de depresión postparto.

Aunque «El empapelado amarillo» no era su obra primera o la más larga, este cuento es sin duda su obra más famosa. La escribió el 6 y 7 de junio de 1890 en su casa de Pasadena,La historia trata una mujer que sufre enfermedad mental después de estar dos meses atrapada dentro de casa mirando al mismo repugnante empapelado amarillo.La narración en primera persona de la obsesión que, día tras día, va acercando a la protagonista a la locura es probablemente el aspecto mejor logrado del relato. La narradora parece lúcida al describir el desvarío alucinado que se va apoderando de ella, contra el que no opone ninguna resistencia.

Gilman escribió esta historia para cambiar la opinión de la gente sobre el papel de la mujer en la sociedad, ilustrando cómo la falta de autonomía de las mujeres iba en detrimento de su salud mental, emocional e incluso física. La narradora de la historia debe hacer lo que su esposo y su doctor le exigen, aunque el tratamiento que prescriben contrasta directamente con lo que ella de verdad necesita: estimulación mental, y la libertad de escapar a la monotonía de la habitación en la que se encuentra confinada.

Para leerlo hacer click aqui

miércoles, 22 de abril de 2015

Juventud

Hoy es 22 de Abril del 2015, estoy en Ojinaga, son las 7:37 a.m y mi nombre es Frida.

La juventud, es lo que estoy viviendo actualmente, es el ahora y es mi realidad. Viendo lo de una manera realista, nunca volveremos a ser tan jóvenes como los somos ahora, o hace unos minutos, todo el tiempo que perdimos y no aprovechamos jamás lo vamos a poder recuperar, es como, si todos tuviéramos un reloj en reversa. Te dan un determinado número para empezar, conforme va pasando tu vida, ese tiempo avanza hasta convertirse en cero cuando morimos. Estoy segura que esto es  o algo terriblemente malo, o una hermosa bendición.

Este curso de pensamientos, no es porque este loca o esté deprimida, es todo lo contrario, me ha hecho cuestionarme sobre lo que soy, sobre quien quiero ser y sobre lo que quiero hacer.

Siempre me he preguntado el por qué en nuestra juventud nos hacen tomar las decisiones, que aunque no sean las más difíciles, son en efecto las que decidirán el curso que va a tomar nuestra vida, por qué si en este tiempo estamos tan confundidos, porque ahora si no sabemos lo que queremos. Por mucho tiempo me frustraba y me volvía a preguntar estas mismas cuestiones. Hasta que un día lo vi muy claro.

Yo estoy en el CETis 98, cuando entré tenía 13 años. Aun que entre siendo un poco tímida, puedo decir que en el camino fui haciendo verdaderos amigos, de esos que van a perdurar en mis recuerdos y hasta en mi vida.

 El primer semestre en el CETis fue fugaz, muchos rostros vinieron y se fueron. Para ese tiempo yo tenía una fuerte imagen de lo que debía ser, debía ser una alumna excepcional, una amiga una hija perfecta. Tenía tan presente eso en mi mente que era todo lo que creía que podía ser.

Un día me quedé dormida mientras veía el canal de música. Escuche una canción, sonaba tan diferente a lo que siempre escuchaba, tenía un sonido tan peculiar, es algo que no puedo describir, pero si algo puedo decir, es que sonaba a mí, ahí fue cuando me di cuenta. 

Puede que para muchos suene cursi, el hecho de que diga que mi perspectiva de la vida haya cambiado con una canción, puede que muchos no le vean ningún sentido, pero para mí lo cambio todo, me hizo darme cuenta de que lo que estaba haciendo no era lo que yo quería.

Con el tiempo empecé a ser mas yo y no la versión perfecta de mi, si alguien se dio cuenta fueron mis compañeros, tal vez ni siquiera lo notaron, comencé a hablar más con ellos, a ser más simpática y no solo por cortesía si no porque yo quería. Esto abrió camino para que pudiera hacer amigos en el salón y apreciarlos como si fueran mi familia.

El cambio fue algo brusco, no lo tenía todo claro, ni todas las respuestas. Este cambio hizo que todo mi plan cambiara, y las preguntas que escribí arriba aparecieron en mi mente. Traté de no pensar mucho en ello, pero la inquietud siempre volvía.

Hasta que un día leyendo un libro, La naranja mecánica para ser exactos, me dio una respuesta. La juventud es la época donde se vive, la época de los sueños, donde todo se ve tan vivo y lleno de posibilidades. Las decisiones se toman en la juventud porque aunque tu vida dure lo que dure, las decisiones que tomaste en esa época te seguirán y te recordaran que las tomaste con un ideal, que aunque luchaste, lloraste y te frustraste esto es lo que tu querías, lo que te hacia feliz.

Como persona y joven, quiero lograr tomar buenas decisiones, decisiones que me alegren que se sientan llenas de vida y que logre recordarlas para toda mi vida.


lunes, 20 de abril de 2015

Adolescencia



Por la definición en wikipedia, la adolescencia es un periodo en el desarrollo biológico, psicológico, sexual y social inmediatamente posterior a la niñez y que comienza con la pubertad. Es un periodo vital entre la pubertad y la edad adulta. Yo tengo 16 años, eso quiere decir que aun soy adolescente, así que esta entrada solo abarcará los tres años que estuve en la secundaria.
                                  
Puedo decir con toda seguridad, que la época en si no es nada fácil, entre las espinillas, el cabello grasoso y el mal de amores, lo más difícil es encontrar que quieres y sobre todo quien eres. Claro, es un proceso vital, pero todo lo que un adolescente quiere en realidad es que termine.

Mi experiencia en la secundaria no fue una aventura filosófica sobre encontrarme a mí mismo y aceptar a los demás como son. No, mi experiencia en la secundaria fue divertida, llena de drama juvenil y angustias.

En mi último año en la escuela primaria, decidí que entraría a la Secundaria Técnica #20. Mi hermano estaba en esa secundaria, así que parecía la mejor opción para mí.

Ese último año en la primaria, lo podría categorizar entre los peores años de mi vida, acababa de perder en la olimpiada de conocimiento, además mis amigas iban a entrar a una secundaria diferente, así que en esos últimos meses desarrolle una actitud de odio hacia los demás (típico de adolescente, ¿no?).

Sí, yo tuve una de esas faces adolescentes de odio al mundo. No estoy orgullosa de eso ni nada, pero las cosas mejoraron cuando entré en la secundaria.

Me gradué de la primaria a los 10 años, a pesar de mi actitud pesimista y depresiva, yo di el discurso de despedida de la generación.

La secundaria no fue tan difícil como los maestros de la primaria te dicen, solo tienes que encontrar tu ritmo y acostumbrarte a un sistema más organizado, y claro, encontrar buenos amigos. Cuando recién entre a primer año, me di cuenta que Selene y Lucero, mis amigas en los primeros años de primaria estaban en el mismo salón, desde ahí las cosas fueron mejorando para mí.

La secundaria Técnica #20 contaba con un servicio de transporte escolar, yo como todos los estudiantes, tomaba el camión, el problema era que nunca encontraba lugar, hasta que un día Oranda García me dio un lugar, hoy en día ella es una de mis mejores amigas.

También conocí a Benjamín, nos peleábamos bastante y hubo un momento dado en el que yo pensé que yo no le agradaba ni un poquito, pero terminamos siendo muy buenos amigos.

El segundo año, estuvo cargado de actividades, empezamos a participar en cualquier exposición o trabajo que pudiéramos, fue muy ajetreado. A diferencia del último año que fue más relajación y no hace nada, más que disfrutar del tiempo que nos quedaba como grupo. 

Desde ahí la vida en la secundaria fue mucho más divertida, aprendí a llevarme bien con mis compañeros, y para el último año ya éramos muy cercanos.

Si lo veo ahora, la adolescencia él una extraña época de tu vida, quieres que termine pronto, pero nunca cambiarías nada de lo que viviste o las personas que conociste en ese tiempo. 






jueves, 16 de abril de 2015

Mi Niñez

Mi nombre es Frida Galilea Ramos Ulloa, tengo diesiseis años y esta es la historia de mi niñez.

Naci y creci en una pequeña ciudad en la frontera entre Mexico y Estados unidos, se llama Ojinaga. Es un pueblo bastante pintoresco, es calido en el invierno, caliente en el verano, primavera y otoño, son mas o menos lo mismo.

 Mii cumpleaños es el 29 de Diciembre de 1998 (Como ya lo dije arriba, tengo 16 años), soy la menor de dos hermanos - una hermana y un hermano- No puedo decir que fui la consentida, pero puedo decir que yo siempre he sido la mas responsable, o tal vez un poco mas cinica que la mayoria de los niños a esa edad, puede que no tenga sentido comentarlo ahora, pero esto me va atraer problemas en el futuro.

Mi niñez fue una de esas epocas que parecen iguales, siempre constante, ni siquiera me di cuenta como paso tan rapido. Me gustaría decir que fue interesante, o hasta tormentosa, pero no fue asi, era mas bien aburrida con toques de felicidad, regular sería la palabra para describirla y no es porque sea amargada o cinica, estoy siendo lo mas realista que puedo aqui.

Nunca he sido de las personas con muchos amigos, no se mantener una convesacion por mucho tiempo, y  soy bastante apatica, esto me trajo problemas al entrar al kinder, al parecer mis compañeros me odiaron casi los dos años que estuve ahí, no estoy orgullosa de esa epoca, pero, descubrí los libros, al pasar tanto tiempo sola (y no salir al recreo) las maestras se convirrtieron en casi las unicas personas con las que podia entablar un conversacion, ellas me leian libros y pronto esos mismos libros se convirtieron en mis mejores amigos.

Me gradue un año antes de lo que debia del kinder, entre a la escuela Margarita Maza de Juarez. Si le preguntaran a cualquier otra persona como me sentia ese dia, les van a decir que a mi no me importo ni un poco si entraba a la escuela siendo casi un año menor que mis demas compañeros, pero si les soy sincera, yo estaba muy asustada, pero, en fin, entre a ese salon tan segura de mi misma como pude estarlo. Nadie me habló, yo no hablé, la verdad mi primer día pudo ser peor.

Los dias pasaron y el año escolar siguio, mantuve, mi reputacion de niña callada y seria, entonces ese verano mis papás me inscribieron en un curso de natacion, ahí entre el olor a cloro, las quemaduras por el sol y el bloqueador solar, yo hice mi primer amiga. Su nombre es Selene. Puede que no hayamos tenido el mejor inicio de las amistades, pero verán, ella me obligo a nadar en una competencia contra su primo, que porcierto era un super nadador-hombre pez-muy competitivo, solo porque ella no queria perder contra el, claro que yo perdí, (a penas podia flotar)  y asi nacio nuestra amistad.

Cuando regresamos a la escuela yo ya no tenia miedo, Selene era mi amiga y ella me inlcuyo en su grupo, la pasé bastante bien con ellas, no me puedo quejar. 

Durante mis años escolares pasaron muchas cosas: participé en los concursos academicos (los cuales gané), entre a clases de karate, aprendí que no soy buena en karate o en los deportes, hice mas amigos, logre desarrollar un poco mas mi personalidad.

Tal vez mi niñez no fue especial o arriesgada como en los libros que tanto me gustaba leer, pero fue feliz, aprendi mucho de mi misma y creo que eso es importante cuando creces, llegar a conocerte a ti mismo, saber quien eres y respetarte tal y como eres sin importar lo que digan los demas.